Moderado optimismo (Puerto y puerta - 152)

 

Por Rafael Zurita Molina (Publicado en el Diario de Avisos el 18 de mayo de 2014).

           

          La pasada semana, por justificada incomparecencia, con el antetítulo “firma invitada” se llenó este espacio con la colaboración de Víctor Morín Varas, que es miembro del Comité de Empresa de Estibadores del Puerto. Su oportunidad, coincidente con las fechas previas a las elecciones al Parlamento Europeo, nos induce a valorar las esperanzadas consideraciones que expresa en su “haciendo camino”. Ineludiblemente, nos invita a recrear los inefables versos de Antonio Machado: “Caminante, son tus huellas / el camino, y nada más; / caminante no hay camino, se hace camino al andar. / ... “. Desde hace 550 años.

          No es novedad la manifiesta confiada actitud de Morín sobre los puertos de Tenerife. Como fehaciente muestra, se patentiza en unas precisas líneas publicadas en el periódico El Día (04.04.2012): “En procesos de transformación estructural como el que está viviendo en la actualidad nuestra sociedad y casi la mundial en su conjunto, no podemos esperar más que conciencia y posturas comunes en asuntos de interés global para la Isla, como es el fortalecimiento del puerto de Santa Cruz. Posturas partidistas son palos en las ruedas, y bastantes dificultades tenemos ya para seguir señalándonos con el dedo entre nosotros en lugar de abrir la mano y compartir soluciones”. ¡Cuanta razón!

          Ahora, en esta página del DIARIO dedicada al dispositivo portuario reproducimos sucintamente escogidos párrafos imbuidos de argumentos positivos, como son los que el pasado domingo expresaba el estimado amigo. En principio, refiriéndose a la desaceleración económica, dice que en tiempos de bonanza, “los trabajadores portuarios ya sentíamos cómo la tendencia estaba dando un giro notable”. También, en primera persona, manifiesta que se alegran con las buenas noticias de la Autoridad Portuaria, como “convertir en un centro de distribución hacia Europa central gracias a un proyecto conjunto con el puerto belga de Zeebrugge-Brujas”.

          Además, destaca la posible instalación de capital ruso en nuestro complejo portuario con la creación de una fábrica alimenticia; y, añade, que no es menos importante la visita de empresarios chinos “para valorar las posibilidades de tomar a Santa Cruz y su conexión con el mar para apuntalar sus inquietudes expansivas hacia África y otros puntos”. 

          Reivindica que desde hace mucho tiempo se viene reclamando una actividad comercial cierta y estructurada para el puerto de Santa Cruz. Sobre las buenas noticias que relaciona y espera se conviertan en realidad, añade que no deben olvidarse los factores que ya están sumando, como los cruceros de turismo, que suponen una economía real para la Isla.

          En fin; con moderado optimismo, se está gestando la ejecución de los trabajos de habilitación del muelle de Ribera. Y sobre las cercanas comparaciones, que cada palo aguante su vela; y que los vientos les sean propicios. Así sea.

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