Tenerife se mueve (Puerto y puerta - 76)

Por Rafael Zurita Molina  (Publicado en el Diario de Avisos el 23 de septiembre de 2012).

 

          Un “Hasta pronto”, que alcanzó casi dos meses, fue el título de esta columna que, a modo de circunstancial adiós, marcaba el inicio de las semanas de descanso estival del suplemento de Economía del Diario de Avisos. Entonces ya proclamábamos nuestro malestar por la ausencia de la isla de Tenerife en la Red Transeuropea de Transporte.

          Y ahora, en este reencuentro que abre la nueva temporada, mi saludo se amalgama con nuestra  esperanzada adhesión a la Plataforma TF-seMueve, que conlleva la intención de aplicarnos en la justa demanda que marca la actualidad. Se trata de hacer entender a Bruselas, en su condición de capital europea, la importancia que tienen nuestros puertos y aeropuertos para cualquier actividad económica y social en nuestra provincia.

          Como bien se argumenta en la reivindicación tinerfeña, “nos jugamos mucho estar en el mapa de las infraestructuras vitales de Europa”. Dicho lo cual, cuesta entender las tantas veces que desde esta Isla (siendo reiterativo, es la mayor y la más poblada de la región macaronésica) se tiene que reclamar lo que por su incuestionable importancia le corresponde; ni más ni menos.

          En otro orden, no debemos silenciar la deplorable imagen que está dando nuestra Comunidad Autónoma en la Unión Europea, en donde se está aireando el litigio -insensato y perpetuo pleito insular- entre las dos compartidas capitales canarias. Además, resulta desalentador saber que este debate se promueve por los que pretenden que la presencia de nuestras islas en la citada Red Transeuropea sea exclusiva de Gran Canaria, descartando a Tenerife. Y piensa uno que,  todavía, sigue creyendo en la musical letra navideña que dibuja a las islas Canarias unidas en un mismo mar, que tal proceder obedece a ciertas ancestrales actitudes egotistas que perduran en algunos, no pocos, insularistas excluyentes.

          Tales posiciones parecen incomprensibles en estos tiempos, cuando ahora mismo la ciudad de Las Palmas, además de ser capital de la provincia oriental, lo es también, compartida con Santa Cruz de Tenerife, de nuestra Comunidad Autónoma. Se sustancia examinando un párrafo extraído de uno de los discursos pronunciados en Las Palmas por don Miguel de Unamuno; fue el 25 de julio de 1910: “Quizá por no ser capital sois lo que sois. Es muy fácil que si hubieseis  sido capital de la provincia, no hubierais hecho lo que habéis hecho y dormiríais a la puerta de los centros oficinescos”. Y, por lo visto y oído, no resulta fácil.

          Sirva como epílogo de este reiniciado nuevo ciclo, un retazo del mensaje que hizo el pasado día 10 el presidente del Cabildo tinerfeño, Ricardo Melchior Navarro: “Llegados a este punto, a diecinueve días de que se produzca el primer paso de la Unión Europea, crece nuestra ilusión en lograr el objetivo perseguido por todos”. ¡Ganaría Canarias!