Adiós al caballero, al hombre bueno

 
Por Patricia Ginovés (Publicado en La Opinión el 4 de agosto de 2016).
 
 
          Los archivos históricos eran el lugar preferido de Luis Cola para pasar las horas. El cronista oficial de Santa Cruz de Tenerife llevaba seis años sin faltar a la cita diaria con el registro capitalino, donde, desde bien temprano en la mañana, se sumergía en las actas del Ayuntamiento y descubría aspectos nuevos de la ciudad en la que nació, creció y falleció. Entre retazos de la historia le quedaba tiempo a Luis Cola para bromear, para enseñar, para aprender y para ayudar. Todo ello entre chistes y la más elegante de las caballerosidades. “Era un hombre bueno”, repiten muchos de los que lo conocieron y tuvieron la suerte de empaparse de sus conocimientos. 
 
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Luis Cola explicando algún aspecto de la calle en que nació (Foto La Opinión)
 
          El jefe del Archivo Municipal de Santa Cruz de Tenerife, Carlos Fernando Hernández, se encontraba diariamente con Luis Cola desde hace seis años puesto que el cronista acudía a este espacio prácticamente todos los días. “Era una persona muy cercana que estaba siempre de buen humor”, recordó Hernández ayer bastante afectado ante el fallecimiento del cronista oficial de Santa Cruz. Carlos Fernando Hernández consideraba al investigador como un pariente.
 
          El presidente de la Tertulia Amigos del 25 de Julio, José Manuel Ledesma, y Luis Cola eran amigos desde hace más de 25 años. “Un día acudí a una de sus conferencias y me cautivó, desde entonces mantuvimos una amistad de maestro y alumno, una relación que, más que de amigos, era de padre e hijo”, expresó ayer Ledesma con el libro que el cronista habría publicado en los próximos meses entre sus manos. “Me había pedido que presentara su nueva obra”, explicó José Manuel Ledesma, quien espera que este nuevo libro pueda ver la luz alrededor del próximo mes de noviembre.
 
          Javier Gorostiza es el presidente de la Asociación Histórico Cultural Gesta del 25 de Julio de 1797, y destacó ayer que “siempre que necesitamos consejos para poder hacer las recreaciones con el máximo rigor posible, Luis Cola se prestó a ayudarnos”. “En una ocasión en la que le preguntamos dónde se ubicaba el cuartel del Batallón de Infantería de Canarias en la época de la Gesta, él reconoció que no sabía la respuesta, pero hasta que no encontró unos documentos que dejaban entrever que podría haber estado cerca del actual Puente Zurita, no se quedó tranquilo”, recordó el presidente de la agrupación encargada de la recreación de la batalla entre las  tropas del contralmirante Horatio Nelson y el general Antonio Gutiérrez. El próximo año se cumplirá el 220º aniversario de aquel enfrentamiento y Javier Gorostiza tiene claro que será algo especial, donde se honrará la memoria de Luis Cola porque “era un hombre bueno”, sentenció Gorostiza.
 
          Luis Cola estuvo vinculado al antiguo Fuerte de Almeyda durante la mayor parte de su vida. El director del Centro de Historia y Cultura Militar de Canarias, el general Alberto Ruiz de Oña, recordó ayer que este espacio fue la sede de la Tertulia  Amigos del 25 de Julio hasta el pasado año, por lo que Luis Cola pasaba muchas horas en el museo. “Era amabilísimo, todo un caballero”, destacó Ruiz de Oña, a quien le gustaba decirle que “el archivo de Almeyda era su casa”. “Se hacía querer porque siempre estaba dispuesto a ayudar, y además contaba muchas anécdotas, así que yo le tenía un cariño especial y nos convertimos en auténticos amigos”, expresó Alberto Ruiz de Oña.
 
          Entre las muchas instituciones por las que pasó el cronista oficial de Santa Cruz de Tenerife se encontraba la Real Sociedad Económica de Amigos del País (RSEAP) de Tenerife. Su director, Jorge Domínguez, destacó “el espíritu colaborativo, así como la fuerza y el esfuerzo” de Luis Cola. “Realizó un trabajo permanente por su Santa Cruz querida”, explicó el director de la Real Sociedad Económica de Amigos del País quien, además, reconoció estar muy agradecido al investigador puesto que “siempre defendió esta institución que, aunque abarca toda la Isla, cuenta con su sede en La Laguna, pero a él eso nunca le importó”. Asimismo, destacó que “Luis Cola supo sacarle todo el jugo al archivo de la RSEAP, darlo a conocer y otorgarle prestigio a este espacio y a toda la institución”. El director Jorge Domínguez concluyó que “Luis Cola siempre estuvo al servicio de la RSEAP en su acercamiento hacia Santa Cruz de Tenerife”.
 
          El investigador Luis Cola también estuvo vinculado al Círculo de Amistad XII de Enero de Santa Cruz de Tenerife. Ignacio González López fue el presidente de esta institución hasta comienzos de este mismo año, un cargo que ocupó durante 20 años y destacó que “cuando dejé este puesto, Luis Cola fue una de las pocas personas que me telefoneó para despedirse”. “Siempre colaboró con nuestra sociedad de forma desinteresada, tanto en la organización de ciclos de conferencias, donde él también participaban, como acudiendo a las representaciones de teatro”, aseguró González, quien recordó que “Cola quería mucho al Círculo, a la sociedad chicharrera por excelencia, como a él le gustaba llamarla”. "Muchas veces lo veía paseando... Bueno, paseando no, más bien dirigiéndose hacia el Archivo Municipal de Santa Cruz, y muchas veces tenía que hacer tiempo porque ya estaba listo a las ocho y media de la mañana”, recordó Ignacio González, quien siempre vio al cronista “ilusionado como un niño, porque cada día que pasaba en ese lugar descubría algo nuevo”, aseguró ayer. “Fue un buen amigo, un hombre bueno y un caballero”
 
          Así, de esta forma, permanecerá Luis Cola en la memoria de Ignacio González y en la de los muchos tinerfeños que tuvieron la suerte de compartir algún tiempo con el cronista oficial de Santa Cruz de Tenerife.
 
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