Artillería (III)
Por José Méndez Santamaría (Publicado en El Día el 8 de diciembre de 2006).
Y para terminar de hablar algo del Arma de la Artillería española, mencionaremos que sus acciones de guerra o fuego fueron numerosas y, claro está, basadas en la defensa del puerto y costa de Santa Cruz de Tenerife contra el ataque de barcos, entre ellos los piratas. Los ataques franceses durante el siglo XVI y, aún más pertinaces, de los ingleses durante los siglos XVII y XVIII, cuyo resultado fue siempre el mismo, ya que la artillería de los baluartes, fuertes y castillos de Tenerife o vencieron o hicieron cambiar de opinión al enemigo.
Se destaca, en los documentos que tenemos en nuestras manos, cómo el pirata francés Saintogne, en 1552, resultó muerto y el hundimiento de su barco. En cuanto a los ingleses, están las ya conocidas y repetidas derrotas del almirante Blake (1657), que ante la imposibilidad de tomar la plaza dio orden de retirada. Los ataques del contralmirante Jennings, hace ahora 300 años, y los del contralmirante Nelson, que fue su única derrota, como ya es sabido, y además perdió su brazo derecho. En la guerra de la Independencia, entre 1808 y 1814, hay que hacer una mención especial por la participación de la Brigada de Artilleros Veteranos de Tenerife.
En la segunda etapa se suceden la campaña de Marruecos y la Guerra Civil (1936-1939). La batería de Armas del Grupo de Montaña, reforzada por personal del de Costa, tomó parte en 17 combates de la campaña de Marruecos entre 1921-1922, en la zona de Larache.
Y no nos podemos resistir a copiar de nuestro modesto libro Cruz Roja Española en la provincia de Santa Cruz de Tenerife. De ayer a hoy lo que nosotros decíamos con respecto a este hecho. En el apartado correspondiente al año 1921, trasladamos textualmente lo que indica el Boletín Oficial (de la Cruz Roja) nº 231, de septiembre de 1921: "La Comisión ofrecióse desde el primer momento a las autoridades militares. Acudió oficialmente a despedir a las fuerzas de la batería de Montaña. Estableció en el muelle un puesto de socorro al mando del jefe de la ambulancia, Sr. Rojas, prestando asistencia a la esposa de un soldado, accidentado. Ha organizado en el local social, San Lucas, 46, un servicio permanente de información, encargándose de la correspondencia entre las tropas expedicionarias y sus familias y de enviar efectos y metálico, todo gratuitamente, y se halla dispuesta no sólo al servicio de evacuación, sino al de hospitales de convalecencia. Al terminar la comida con que fueron obsequiadas las fuerzas de artillería que embarcaron en aquel puerto y que fue servida por distinguidas señoras y bellas señoritas, las Damas de la Cruz Roja repartieron a los soldados paquetes de puros y cigarrillos, dinero y medallas con la imagen de la Virgen. Los artilleros, bajo la advocación del Santísimo Cristo de La Laguna, regresaron a casa sin ninguna baja. De todos es sabido y conocido el amor de los artilleros al Cristo lagunero, no en vano son, mejor dicho eran, vecinos colindantes".
Por este hecho, el Jefe del Estado, en agosto de 1959, concede honores militares máximos a la santa imagen.
Siempre iba escoltada por los gastadores de artillería y el Regimiento rendía los honores correspondientes y la acompañaba procesionalmente. Esto desapareció hace unos años. Humildemente, este modesto escribiente solicita, y no es el único, del señor obispo de nuestra diócesis que vuelva a autorizar que la escuadra de gastadores acompañe a "su" Cristo. Más de un artillero y el pueblo lagunero, de seguro, que se lo agradecerá profundamente. En muchísimas procesiones en otras provincias españolas vemos cómo las imágenes van siempre escoltadas brillantemente por fuerzas militares.
En la contienda de 1936, el Grupo Mixto de Artillería nº 2 tomó parte en varios combates, concediéndosele a la Primera Batería expedicionaria la Cruz Laureada Colectiva de San Fernando y, por una acción heroica , al capitán Rodrigo, sucesor en el mando del capitán Brotons, se le concedió la Medalla Militar Individual. Además recibió la Medalla de Oro de Santa Cruz de Santiago de Tenerife el 17 de julio de 1956, y a la bandera se le impuso una Corbata por el Ayuntamiento de San Cristóbal de La Laguna el 6 de septiembre de 1964.
La actual bandera fue entregada por el ayuntamiento de nuestra capital, el 4 de diciembre de 1982, conmemorando su centenario, siendo la madrina la señora doña Asunción Varela, esposa del alcalde, en ese entonces, don Manuel Hermoso Rojas.
Hay un extenso cuadro correspondiente a los acontecimientos más significativos relacionados con la defensa de Santa Cruz, y nos podemos remontar al 21 de junio de 1464, cuando Diego de Herrera toma posesión formal de la Isla a través de las "Paces del Bufadero" y se construye la torre de Añaza. Vamos viendo fechas y hechos que harían este artículo interminable, pero podemos reflejar también el 2 de noviembre de 1495, el segundo desembarco de las tropas conquistadoras al mando de don Alonso Fernández de Lugo, aunque algunos autores dan como posible fecha la del día 5, y se reconstruye por tercera vez la torre de Añazo. En 1513 se construye el primer baluarte defensivo de Santa Cruz y se inician los trabajos en el primer muelle.
Hay cosas muy interesantes que se quedan en el tintero, amén de que otros investigadores y escritores han venido publicando en los medios informativos, así como magníficos libros que se encuentran en las bibliotecas de los estudiosos y amantes de nuestra historia, en la flamante Biblioteca Regional Militar ubicada en el acuartelamiento de Almeida, verdadera cuna de cultura a la que debemos cuidar todos y dotar cada día más con legados importantes que a lo mejor están "estorbando" en alguna casa de nuestras queridas islas.
4 de diciembre, ¡Santa Bárbara! Felicidades, artilleros.
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