Dos recortes sobre la compostura británica

Por las respectivas Redacciones  (Publicados en El Diario de Avisos y La Gaceta de Canarias el 7 de mayo de 1997).

 

Diario de Avisos (Sección El avispero)

¿Qué fue de la compostura británica?

          Cuentan las avispas que el pasado lunes estuvieron presentes en la inauguración de las exposiciones sobre la Gesta del 25 de julio, en el Museo Militar de Almeyda, que entre los asistentes se encontraban dos oficiales de la fragata británica Sommerset, a los que incluso se refirió cortésmente el presentador del acto. Lo curioso del caso es que ambos elementos se mantenían erguidos a duras penas, ante el calibre de la “tranca” que tenían encima, lo que puso una nota discordante al importante evento cultural. Y es que, en algunas ocasiones, los descendientes de Nelson no saben -o no quieren- guardar la debida compostura en una tierra hospitalaria que, por azares del destino, tiene el orgullo de haber infringido una de las derrotas más importantes y sonoras en la vida del legendario contralmirante.

 

La Gaceta de Canarias (Sección El bernegal)

expo_almeyda

 

Exposiciones para un bicentenario.

          El lunes se abrieron dos exposiciones, en el antiguo Cuartel de Almeida, para conmemorar el bicentenario de la derrota de Nelson en Santa Cruz de Tenerife. Como se ve, asistieron las autoridades civiles y militares y, el pueblo, entusiasta, abarrotó el recinto. Lo que podría haber sido una celebración popular, quedará en una serie de actos rimbombantes que van a atraer al personal tanto como la procesión del Pendón. Al fondo, de blanco, los dos oficiales británicos de los que hablamos en otro lugar de esta misma página.

          Y no es que la tengamos tomada, desde ya, con las exposiciones nelsonianas, oigan. Pero, el que avisa, es avisador. De forma que advertimos al personal que vaya a visitar la exposición civil del Museo de Almeida -situada en los bajos del edificio-que penetren en ella preparados para soportar el fuerte tufo a vaca que invade la muestra, debido a la presencia de un par de estos cornúpetas -a los que podrían rociar un con fisco de Chanel nº 5- para darle más realismo a la cosa.

Bonita representación…

         La Armada Británica envió una representación protocolaria, en las personas de dos oficiales  de un buque de guerra inglés, atracado en el Puerto de Santa Cruz, a los actos de inauguración de las exposiciones del Cuartel de Almeida, con motivo del segundo centenario de la derrota de don Horacio Nelson por estos terruños (y por estos mares). El detalle habría estado bien, si los dos marinos destacados al acto, vestidos, eso sí, de blanco impoluto, no hubiesen llegado a la ceremonia cargados como auténticos erizos. Apenas si se tenían en pie y el espectáculo fue lamentable, pese a la serenidad de las fuerzas vivas que presidían el evento (desde el alcalde, Miguel Zerolo, hasta el Jefe de la Zona Militar, general Ripoll). El encargado de protocolo del Ayuntamiento chicharrero, Manolo Pío, tenía una calentura del quince y nadie sabía muy bien cómo salir de la situación, mientras los alegres protagonistas del desaguisado se aferraban a sendas botellas de vino del país y continuaban poniéndose morados… La verdad es que si los marinos de Nelson llegaron a Santa Cruz en el mismo estado en que lo hicieron, el otro día, sus sucesores al servicio de Su Graciosa Majestad, la victoria del general Gutiérrez perdería bastante mérito histórico. Derrotarlos, con tales pedos, habría sido como pelear contra un grupo de críos.

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