Entrevista a Luis Cola, nuevo Cronista Oficial de Santa Cruz de Tenerife

 

“Santa Cruz es la única ciudad española que jamás fue conquistada”
"El patrimonio está dejado de la mano de Dios y el peor caso es el cementerio de San Rafael", afirma Luis Cola Benítez, nuevo cronista oficial


por Maryorie González (Publicado en La Opinión el 30 de junio de 2011)

          Luis Cola camina tranquilo, con un gesto sosegado y un tanto reflexivo. Una ligera sonrisa se dibuja en su rostro y sus gafas de sol le aportan un aire juvenil. Irradia bienestar y probablemente se deba a su recién nombramiento como cronista oficial de Santa Cruz. Sentado en uno de sus lugares favoritos, la plaza Weyler, recuerda las interminables tardes de verano de su niñez en la calle Callao de Lima mientras jugaba a la pelota de trapo.

         Su vida siempre ha sido Santa Cruz y ha dedicado más de 50 años a conocer cada lugar y cada retazo de historia de la ciudad. Comenzó muy joven, cuando solo tenía 14 años, pero desde que leyó las primeras crónicas sobre la capital quedó enamorado al instante. Asegura tener muy poca memoria, pero ello no ha sido un impedimento para publicar 13 libros y más de un millar de artículos sobre estas calles chicharreras. Arrellanado en uno de los bancos de la plaza habla sobre el pasado, el presente y el futuro de la capital.

      –¿Cómo recuerda al Santa Cruz de su niñez?

     –Ha cambiado mucho desde entonces. Nací en la calle Callao de Lima y recuerdo como si fuera ayer las horas interminables jugando a la pelota de trapo. Eso sí, cada media hora teníamos que irrumpir el juego porque venía un coche. Más tarde me trasladé a Villa Benítez, cerca de Vistabella, en donde permanecí hasta 1964. Cada vez que tenía que bajar al centro a por unos zapatos nuevos era como un castigo. Me lo pasaba muy bien en las huertas, cazando lagartos, tirando piedras y haciendo ruindades con todos mis primos.

     –¿Dónde estudió?

     –En los Escolapios, pero no era buen estudiante. Siempre he tenido muy mala memoria. Creo que es algo patológico, aunque a base de machacar, uno se va quedando con algo. Desde muy joven comencé a interesarme por la historia de la ciudad y de Canarias. Recortaba los artículos en los periódicos como los de Elías Serra, Buenaventura Bonnet o Sebastián Padrón Acosta. Lo he llevado en los genes.

     –¿Le viene de familia?

     –Mi abuelo tenía uno de los primeros museos privados de Canarias, el museo Villa Benítez. Guardaba una fantástica colección de minerales que ha servido de base para el museo de la Naturaleza y el Hombre. Todos los domingos abría las puertas de su museo personal para que los santacruceros lo visitaran. Eso me influyó.

     –¿Qué lugares destacaría de aquella época?

     –El parque municipal antiguo, la plaza del Patriotismo, las películas en el parque Recreativo y el cine de La Paz.

     –¿Y ahora cuáles figuran entre sus favoritos?

     –Por supuesto la plaza Weyler es uno de ellos, pero también el barrio antiguo, la calle Cruz Verde, la plaza de San Francisco y el parque García Sanabria.

     –¿Qué puede decir de la plaza Weyler en la que se encuentra?

     – Es el Picadilly Circus de la ciudad, el Trafalgar Square de Santa Cruz. Conocí esta plaza cuando todavía tenía muros de piedra basáltica alrededor y el piso era de tierra. Era un sitio de encuentro y ahora es de paso. En el siglo XVIII, a este lugar lo llamaban el campo militar. Todo este terreno era del famoso corsario Amaro Pargo. Luego el general Weyler cambió de lugar el Hospital Militar y se hizo Capitanía. Este edificio sirvió de eje para que se urbanizara la zona.

     –¿Cree que el Consistorio mantiene su patrimonio histórico?

     –El patrimonio de Santa Cruz está dejado de la mano de Dios. El caso más sangrante es el del cementerio de San Rafael y San Roque. Allí están enterrados los hombres más importantes que ha dado la ciudad, los que sentaron las bases de lo que hoy es la capital. Pero la culpa no es de este Ayuntamiento, sino que viene de más de 70 años atrás. Llevo muchos años reclamando que arreglen fuentes como la de Isabel II. El barrio del Toscal también se está cayendo y otras viviendas situadas en la calle del Sol o de La Palma que son del siglo XVII, se encuentran en un estado de abandono palpable. Antes de dinamizar hay que arreglar.

     –¿El santacrucero conoce su ciudad?

     – Los santacruceros no tienen ni idea del suelo que habitan. Es increíble que no se conozca la ciudad donde uno vive, que no se sepa quién es Viera y Clavijo o José Murphy. Aún es más grave que haya calles con nombres erróneos, como es el caso de la calle general Galcerán, claro ejemplo de que se ha confundido el lugar con un general que jamás existió. Lo mismo ocurre con la calle general Porlier, cuando este señor no fue nunca militar.

     –¿El chicharrero está orgulloso de serlo?

     –Nacer y vivir en Santa Cruz es un privilegio. Es un pueblo grande que no tiene las desventajas de las ciudades. Uno es hijo de donde nace y menospreciar el lugar de origen sería como faltar a la madre. A pesar de ello, hay que hacer más por la ciudad. La educación es primordial para que los ciudadanos sepan apreciar lo que tienen. No tenemos la Fontana de Trevi, pero es nuestro patrimonio y hay que ponerlo en valor y mimarlo.

     –¿Qué personajes ilustres destacaría de Santa Cruz?

     –Le debemos mucho a José Murphy, padre de la capitalidad. José María de Villa y José Víctor Domínguez fueron dos alcaldes que también hicieron mucho por la ciudad. Gracias a ellos en 1803 se consiguió el título de Villa Exenta. No me puedo olvidar de dos estudiosos como Alejandro Cioranescu y a Marcos Guimerá Peraza. Son únicos.

     –¿Santa Cruz da la espalda a los héroes y mitifica a los derrotados?

     –No lo creo. Quizá se ha reconocido más a personajes como a Nelson en lugar de a Gutiérrez, pero ello se debe a que el almirante inglés era un Dios para Inglaterra.

     –¿Qué episodio destaca de la ciudad?

     – Es la única ciudad española que jamás ha sido conquistada. En 25 años de historia pasó de ser un barrio de La Laguna a ser capital de toda Canarias. ¿Le parece poco?

     –¿Qué opina de la política actual?

     – Nuestro alcalde [José Manuel Bermúdez] es un enamorado de Santa Cruz y Julio Pérez [teniente de alcalde] tiene una gran talla intelectual y un apasionado de la capital.

     –¿Qué opinión le merece el recién fallecido Gilberto Alemán?

     –Un trabajador nato. Llegaba el primero al Ayuntamiento y se pasaba horas estudiando. Él si que contaba miles de anécdotas de aquí.