El nombre de nuestras calles (98). Garcilaso de la Vega
Por José Manuel Ledesma Alonso (Publicado en el Diario de Avisos el 29 de octubre de 2023).
EL NOMBRE DE NUESTRAS CALLES (98)
Calle Garcilaso de la Vega
Desde la avenida San Sebastián a la calle Calderón de la Barca
Garcilaso de la Vega (Toledo, 1501 - Niza, 1536).
Perteneciente a una noble familia castellana, al quedar huérfano de padre cuando tenía 10 años, ingresaría en la Corte de Carlos I, donde aprendería griego, latín italiano y francés, así como a tocar el arpa, el laúd y la cítara, y formarse como experto en esgrima. En la Corte conocería al caballero-poeta Juan Boscán, con quién le uniría una gran amistad. hijos. En 1525 contrajo matrimonio con Elena de Zúñiga, dama de doña Leonor, hermana de Carlos I de España, con quien tendría cinco hijos.
En 1520 sería armado caballero, entrando a servir al rey Carlos I. Tres años más tarde fue designado Caballero de Santiago y gentilhombre de la Casa de Borgoña. En los años siguientes participaría con el Emperador en la guerra contra los comuneros de Castilla y se embarcó en la expedición de Pedro de Toledo y Juan Boscán para evitar la caída de Rodas, en poder de los turcos. En 1530 lo acompañaría a Bolonia, cuando el monarca recibió la corona Imperial de manos del Papa Clemente VIII, pasando a ser Carlos I de España y V de Alemania.
De vuelta en España, fue testigo de la boda de su sobrino, enlace que no había sido autorizado por el Emperador, por lo que lo desterró a la isla de Schutt, en el Danubio, lugar que abandonaría al ser solicitado por el virrey de Nápoles para luchar contra los turcos. En Italia sería nombrado alcalde de Reggio di Calabria.
Cuando Francia invade Saboya, y Carlos I le declara la guerra, Garcilaso de la Vega fue herido al intentar escalar la fortaleza de Muy (Provenza), siendo trasladado a Niza, donde fallecería el 13 de octubre de 1536.
Después de su muerte, la viuda de su amigo Juan Boscán reunió los versos que había dejado escrito, los revisó y los publicó con el título Las obras de Garcilaso de la Vega. Este libro está formado por treinta y ocho sonetos, cinco canciones, tres églogas, dos elegías y una epístola.
La mayoría de estas composiciones reflejan su pasión por Isabel Freyre, una dama portuguesa de la ReIna, a quien el poeta conoció en 1525, cuando la Corte estaba en Granada.
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