Patrimonio industrial de Santa Cruz de Tenerife: Fábrica de tabacos (I).

 
Por José Manuel Ledesma Alonso (Publicado en El Día elá 14 de noviembre de 2021).
 
 
 
          Santa Cruz de Tenerife fue una ciudad tabaquera en la primera mitad del s.XX, ya que llegaron a existir hasta 36 fábricas donde se elaboraban productos de excelente calidad, lo que proporcionaría una importante fuente de riqueza.
 
          La belleza arquitectónica de los edificios que albergaron estas industrias, aún continúan embelleciendo el urbanismo de la ciudad.
 
 
La Victoria 
 
01.- La Victoria Personalizado
 
         
          El edifico de la fábrica de tabacos La Victoria, que aún se conserva en la Avenida Islas Canarias nº 2, cuyo propietario era  Luis Zamorano González, fue construido en 1922 según el proyecto del Arquitecto Antonio Pintor y Ocete, ocupando una superficie de 1.195 metros cuadrados.  
 
          Es una construcción de planta rectangular, desarrollada en torno a un gran patio central, cubierto a dos aguas, con galería alrededor, donde la luz solar tendría un cometido esencial en la actividad tabaquera.
 
          La fachada, asentada sobre basamento y semisótano, utiliza como único ornato el orden gigante en las formas estructurales.
 
        Sus dos plantas están compuestas por grandes ventanales de carpintería metálica, en dintel recto en el primer nivel, y en arco en el segundo nivel, cuyos cristales aportan gran luminosidad al interior. El muro está distribuido en siete grandes vanos por planta, con la puerta de acceso central. Todo el conjunto esta rematado con arquitrabe, friso y cornisa.
 
          La parte baja estaba destinada a los trabajos de fabricación de cigarrillos y almacén, mientras que en el piso superior se seleccionaba y manipulaba el tabaco, cuyas marcas reconocidas eran La Nobleza, La Distinguida, o La Mascota.
 
          Las trabajadoras de la fábrica disfrutaban de bastantes mejoras sociales, como el traslado desde su domicilio hasta la fábrica; además, en las instalaciones disponían de botiquín de urgencias, cantina, etc.  
 
          En 1935, su infraestructura fue modificada para ubicar en ella el Cinema Victoria y la vivienda anexa. 
 
 
El Águila
 
02.- El Águila Personalizado
 
         
          El edifico de la fábrica de tabacos El Águila, que aún podemos contemplar en la calle Pérez Galdós nº 19, esquina Suarez Guerra nº18, cuyo propietario era Manuel Morales Clavijo, fue construido en  1923, según el proyecto del arquitecto Domingo Pisaca Burgada.
 
          Manuel Morales Clavijo, nacido en Arico, había emigrado a Cuba donde aprendió las técnicas de fabricación del tabaco. Al  regresar a Tenerife, en 1908, fundaría su negocio de manufactura tabaquera en la calle Puerta Canseco, a la vez que abría un estanco de venta de tabaco en la calle Imeldo Serís.
 
          El edificio de  estilo ecléctico, formado por una planta concéntrica en forma de abanico adaptada a las características del solar, mide 1.528 metros cuadrados. 
 
          En las dos fachadas predomina la composición ornamentada, balaustradas y detalles decorativos, así como dinteles con listas y dovelas. El frontis que da a la calle Pérez Galdós  se divide en tres paños verticales con vanos dispuestos simétricamente, y el que da a la calle Suárez Guerra cuenta con cinco paneles con idéntica organización. En el ángulo de confluencia de ambas esquinas se colocó uno de los elementos más representativo del edificio, un balcón circular saliente con el emblema de la firma, la escultura de un Águila con las alas desplegadas.
 
          Cada una de las cuatro alturas del edificio tendría su función determinada. La planta baja se utilizaba para la administración, venta minorista de productos manufacturados, y depósito de materias primas. El primer piso estaba destinado a los trabajos propios de manufacturación; es decir, precintado, aniñado y prensado. En la tercera planta se realizaba la selección del tabaco y el liado a mano. Y en la superior se elaboraban los cigarrillos y los cigarros puros.
 
          El edificio sería adquirido en 1970 por Victor Zurita, propietario de La Tarde. Al cerrar el periódico, el inmueble permanecería vacío hasta que en 1984 lo compró el Parlamento de Canarias, siendo remodelado en el año 2000 para albergar la sede de la Audiencia de Cuentas de Canarias.
 
 
- - - - - - - - - - - - - - - - - - -