Mi ciudad no es una ciudad de muchas placas... (Retales de la Historia - 96)

Por Luis Cola Benítez  (Publicado en La Opinión el 17 de febrero de 2013).

 

          Hace algún tiempo, el periodista y escritor tinerfeño Fernando G. Delgado publicó un interesante artículo bajo el mismo título que hoy le tomo prestado para este Retal. Comenzaba su escrito: “Mi ciudad no es una ciudad de muchas placas ni muchos recordatorios. No sé si le falta orgullo, que eso es bueno, o le falta memoria, que eso es malo, o no es muy agradecida, que tampoco es bueno.”

          Además de una divertida anécdota de sus tiempos de colegial, cuando se atrevió a corregir a la profesora de Historia por desconocer que el general Leopoldo O’Donnell había nacido en Santa Cruz, sobrada razón tenía, y sigue teniendo, en lo que expresa en este primer párrafo que hemos transcrito. Pero entre las razones que aduce para la ausencia de placas falta una primordial, y no es otra que la poca atención que se ha prestado en la enseñanza a nuestra propia historia. Y así nos va.

          Es cierto que, históricamente, a Santa Cruz le ha faltado orgullo y son innumerables las ocasiones en las que no ha sabido, no ha querido o no ha sido consciente de sus propios valores, ganados a pulso con esfuerzo y decisión a lo largo de su historia. Pero ello no ha sido consecuencia de falta de memoria, sino de la ignorancia o inadvertencia de esos mismos valores, pues no se puede tener memoria de lo que no se conoce. Y el desconocimiento de la mayor parte de nuestros conciudadanos sobre la historia de la ciudad es asombroso. Y no son ellos los primeros culpables.

          La ausencia de señalización urbana sobre sitios o acontecimientos históricos o peculiares, en forma de placas o cartelas explicativas o recordatorias, es sin duda una de las asignaturas pendientes de Santa Cruz. Es cierto que no poseemos la monumentalidad milenaria de otras urbes, pero en nuestra ciudad son muchos los lugares, barrios, edificios, plazas, calles, rincones, que guardan inadvertidamente con su modesto silencio recuerdos, sucesos, anécdotas, que en conjunto forman la auténtica y más entrañable historia de la ciudad, y que en su mayoría son desconocidos para los propios vecinos que la habitan o desenvuelven su vida en ella.

          ¿Cuántos vecinos conocen el origen de la vieja fuente basáltica en forma de copa situada hoy en la Plaza de la Candelaria y lo que representó entonces para el pueblo? ¿Y las de Morales junto al antiguo hospital, o la de Isabel II de la calle de la Marina? ¿Y qué decir de las antiguas ermitas de San Telmo y San Sebastián? ¿Y por qué y cómo se formaron los barrios Duggi, Los Hoteles, La Salud o Valleseco? ¿Qué tesoros o secretos encierra la iglesia matriz de la Concepción? ¿Cuál es el origen de nuestras hermosas Ramblas? ¿Por qué el nombre antiguo de la calle Dr. Guigou era el de calle de las Canales Bajas? Y podríamos seguir con innumerables ejemplos de clamorosa ignorancia, que nadie hasta ahora se ha preocupado de remediar poniendo al alcance de los vecinos de Santa Cruz, de forma sencilla y clara, la información necesaria.

          Si se posee interés por nuestros orígenes, por nuestra historia, se puede recurrir a libros y textos divulgativos que nos aclaran muchas de estas cuestiones, pero… ya conocemos el índice de lectores entre el común de los ciudadanos. También está Internet, donde se puede encontrar información sobre prácticamente todo, pero no siempre fiable ni al alcance de todo el mundo. Por esta razón la Tertulia Amigos del 25 de Julio promovió la colocación de sendas placas en la iglesia del Pilar y capilla de la Orden Tercera recordando importantes acontecimientos cívicos allí celebrados.

          Hoy la Tertulia está empeñada en un proyecto a medio plazo con el objeto de ofrecer una información veraz y sucinta que salga al paso y salte a la vista del transeúnte, vecino o visitante, proyecto que ya ha comenzado a hacerse realidad, con la inestimable colaboración de la Autoridad Portuaria y del Excmº. Ayuntamiento, con la inauguración de seis hitos que recuerdan hechos o lugares históricos de nuestra ciudad. Estos hitos, con placa explicativa, son: Castillo de San Andrés, Castillo de Paso Alto, Fuerte de San Miguel, Batería de Santa Teresa, Homenaje a la campesina que alertó del primer intento de desembarco de las fuerzas de Nelson el 22 de julio de 1797 y a las aguadoras de Santa Cruz que suministraron a las tropas establecidas en la Altura de Paso Alto que evitaron el avance británico hacia la población.

          La Tertulia va a seguir con el proyecto, y no sólo en referencia a la Gesta y al recuerdo de que Santa Cruz fue la única Plaza Fuerte de Canarias, sino que  próximamente dedicará otras placas o hitos a la Pila, casa natal de O’Donnell, el Gabinete Instructivo, la Alameda de la Marina, antiguo muelle, marquesina, farola, restos de la muralla defensiva y otros muchos lugares históricos de la ciudad.

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