El cañón Tigre pide su retorno al Museo de Almeyda
por Pedro Ontoria Oquillas (Publicado en El Día / La Prensa el 11 de septiembre de 2010).
Existe cierta confusión entre los tinerfeños sobre el emplazamiento del célebre cañón El Tigre que constituye uno de los símbolos santacruceros: cuenta la tradición que fue esa pieza artillera la que, desde el castillo principal de San Cristóbal, hirió al contraalmirante Nelson, provocando la amputación de su brazo derecho. Y cuando el pueblo conjetura algo, sea o no verídico, termina por convertirse en leyenda. Se considera que estuvo situado en la tronera abierta hacia la playa en la Batería de Santo Domingo, anexa al Castillo de San Cristóbal pocas horas antes del ataque en la noche de la gloriosa Gesta del 25 de Julio de 1797. Ambos asentamientos estaban, muy cerca de la calle Villalba Hervás, que en aquel entonces se denominaba de Nuestro Señor del Huerto y que después pasaría a denominarse El Tigre. ¿Existe relación entre el cañón y la calle?
Y confusión y aturdimiento existen en la actualidad chicarrera al no definirse el Ayuntamiento con claridad dónde debe exhibirse el simbólico cañón: ¿en el Museo Militar de Almeyda, donde se ha expuesto dignamente durante 22 años de forma ininterrumpida, o en el Centro de Interpretación del Castillo de San Cristóbal (bajo la Plaza de España), donde ha sufrido ya varios desperfectos haciéndonos poner en duda los versos de un reciente cuarteto “Y en este día tan señalado / ya vuelves a estar en tu fortín, / Castillo San Cristóbal que por fin / acoge su símbolo preciado”? (Nota 1). El día señalado se refiere a la fecha que fue traslado en julio de 2009, pero el “estar en tu fortín” ha decepcionado por los acontecimientos ocurridos.
Sin embargo, sí hay que recordar que El Tigre se ha convertido en un verdadero símbolo de la Ciudad y, precisamente, con motivo de la celebración del Quinto Centenario de la misma (1994) se acuñaron trece monedas de plata con los símbolos históricos más característicos; entre ellos, el único que no era monumento en piedra era el preciado cañón. Y en 1997, con motivo de celebrarse el Bicentenario de la Gesta del 25 de Julio, el alcalde de la ciudad quiso fotografiarse con el preciado cañón. ¿Qué significado podía tener tal gesto? Simplemente hay que recordar que Santa Cruz debe el título de Villa a la derrota de Nelson y ésta relacionado con el disparo de El Tigre y, por tanto, se ha convertido en un verdadero símbolo de la Ciudad. Poetas y cronistas se han ocupado del cañón, narrando su hazaña. Artesanos y orfebres lo han reproducido a escala. Pero, a la hora de describirlo y de contar su historia, muchos son los que han errado. (Nota 2).
Descripción del cañón
El cañón denominado El Tigre tiene 13,3 cm. de calibre por 279 de longitud de ánima, y era de los llamados de a 16, porque disparaba balas de hierro de 16 libras (7,360 Kg.). El cascabel (remate posterior de la pieza) es esférico y tiene varias hojas de adorno, en la lámpara lleva grabada la fecha de de su fundición y el nombre de su fundidor: SOLANO FECIT SEVILLA AÑO DE 1768, es decir, que fue fundido y barrenado en Sevilla por un constructor llamado Solano en 1768. El grano de fogón, que servía para efectuar el disparo con el botafuego, está abierto en la misma pieza, rodeado de una roseta floreada en relieve. En el primer cuerpo lleva un escudo de cuatro cuarteles con las armas de Castilla y León y la leyenda “Carolus III D. G. HISPAN. ET IND. REX” [Carolus III Dei Gratia Hispaniarum et Indiarum Rex, Carlos III por la Gracia de Dios Rey de las Españas y de las Indias]. En el segundo cuerpo, separado del anterior por una moldura con cordón, se hallan los muñones y asas que representan delfines. El muñón derecho tiene la inscripción: 44 QQS 62 LIBS [es decir, su peso es de 44 quintales y 62, 5 libras (2.053 kg)] y, en el izquierdo: COBS. AFINS. ILIGS. (Cobres afinados y ligados). En la faja de separación del segundo y tercer cuerpo tiene una cenefa con varios adornos en relieve. En el tercer cuerpo la divisa VIOLATI FULMINA REGIS (Rayos del Rey ofendido); más arriba, en filacteria el nombre de la pieza “EL TIGRE” y cerrando el brocal, otra cenefa con iguales adornos. (Nota 3).
Recorrido histórico
En junio de 1797 la Plaza de Santa Cruz de Tenerife estaba artillada con 84 cañones y 7 morteros que fueron los que hicieron frente a la escuadra inglesa mandada por el contraalmirante Nelson y participaron de manera activa en la victoria, el 25 de Julio de 1297. De toda aquella Artillería sólo se ha conservado El Tigre (Nota 4)que permaneció muchos años en el Castillo de San Cristóbal. Por otra parte, es interesante recordar que el cañón Hércules estaba también en San Cristóbal, pero “desmontado” por determinados problemas en el ánima, aunque se le volvería a hacer una cureña de circunstancias por si los ingleses regresaban. (Nota 5)
En 1821 seguía en el Castillo y se enseñaba a viajeros y curiosos. Posteriormente existen numerosas reseñas en periódicos y según Poggi y Borsoto, el castillo sufrió reformas y “ha desaparecido tanto la tronera como el cañón”. (Nota 6).
En 1882 el cañón yacía olvidado cuando un hecho sencillo le devolvió su importancia. Por orden de la superioridad se dispuso la creación de una batería provisional, para hacer salvas, en Las Palmas de Gran Canaria, y las piezas que se asignaron para tal batería fueron unos cañones antiguos de bronce que en Tenerife estaban dados de baja por inservibles; entre aquellos cañones estaba El Tigre. Cuando se iban a embarcar, nadie recordó la tradicional leyenda que tenía uno de ellos, pero don Manuel Martel Carrión, comisionado de la República de Venezuela en Tenerife, descubrió que, entre aquellos oscuros bronces, estaba el famoso El Tigre y, al recordar su historia, tan popular en otro tiempo, elevó aquella pieza a la categoría de preciado trofeo. De este modo, El Tigre reapareció triunfante y glorioso. (Nota 7). El 27 de julio de 1885 el teniente de Artillería Juan Arzadun Zabala, destinado en el Parque de Artillería de Santa Cruz, leyó en el Gabinete Instructivo de esa ciudad un poema dedicado al cañón El Tigre. (Nota 8).
El 7 de febrero de 1894, el alcalde de la ciudad solicitó el cañón al Capitán General que, autorizado por el ministro de la Guerra el 16 de abril lo cedió en los siguientes términos: “S. M. el Rey (q.D.g.)y en su nombre la Reina Regente del Reino ha tenido a bien disponer se haga donación del cañón llamado “Tigre” que existe en el fuerte de San Pedro de Santa Cruz de Tenerife al Ayuntamiento de dicha capital para que pueda ser instalado en el monumento conmemorativo de la derrota de los Ingleses en 1797 cuando atacaron la antes dicha plaza al mando del almirante Nelson”. (Nota 9).
El 23 de abril del citado año, el entonces alcalde don José Sansón y Barrios dio lectura a la corporación del antes citado escrito. La corporación debió transmitir la idea de la erección de un monumento a los Héroes del 25 de Julio a las instituciones, pues meses después en 1896, ante la proximidad del centenario, la Real Sociedad Económica de Amigos del País de Santa cruz de Tenerife convocó un concurso en sesión celebrada el 14 de abril al que se presentaron tres proyectos. (Nota 10).
Con motivo de la visita de S. M. el Rey Alfonso XIII a las Islas Canarias, entre los últimos días de marzo y primeros de abril del año 1906, la ciudad de Santa Cruz le presento una bella alegoría formada con la Cruz de la Conquista, que le da nombre, flanqueándola las banderas cogidas a los ingleses, las banderas de las Milicias Canarias, a su pie el cañón El Tigre y al fondo la silueta del pico del Teide.
El 4 de septiembre de 1912 la corporación solicitó que el cañón se colocara en el Museo Municipal, pues se encontraba en el callejón del edificio de la Institución de Enseñanza. No debió surtir efecto la propuesta ya que el 27 de diciembre de 1916 se estudiaba la conveniencia de ubicarlo en los bajos de la escalera del Ayuntamiento donde numerosos santacruceros recuerdan estuvo muchos años.
Ya en esas fechas se había convertido en símbolo de la ciudad y era reproducido en forma de tarjetas postales que recorría el mundo.
Aprovechando la creación del Museo de Paso Alto, fundado como homenaje a la gesta del 25 de julio de 1797, El Tigre fue encabalgado de nuevo en una cureña réplica de la original realizada por el antiguo parque de Artillería (UST y M. del Regimiento de Artillería de Costa de Tenerife). El cañón se instaló en la plataforma de Paso Alto junto con El Horrible, El Torpe, Invencible y Espanto, cañones que habían sido traídos de la Península. El Museo fue inaugurado por el Ministro del Ejército el día 2 de mayo de 1955, pero tuvo corta vida.
El cañón permaneció en la plataforma de Paso Alto hasta que, el 5 de enero de 1988, la Comisión de Gobierno del Excmo. Ayuntamiento de Santa Cruz de Tenerife acordó cederlo en depósito para ser expuesto al público en el Museo de Almeida como recuerdo a las generaciones venideras y homenaje a los defendieron a la ciudad. A decir del entonces alcalde, don Manuel Hermoso Rojas, “para que pudiera ser conservado por los que entienden de la materia, y también para que el cañón estuviera a la vista de miles de escolares y otros ciudadanos cada año”. Misión que se ha cumplido felizmente durante su permanencia en el Museo de Almeyda; no en vano el museo Militar Regional de Canarias es uno de los mejores museos militares de Europa.
En el Museo de Almeyda, donde se exhiben los objetos y documentos más destacados relacionados con la épica jornada del 25 de julio de 1797, ocupaba un lugar principal el cañon de bronce El Tigre. Estaba perfectamente conservado y en condiciones de hacer fuego. La victoria cosechada por Santa Cruz de Tenerife el 25 de julio de 1797, ante el ataque de la armada británica que dirigió el contraalmirante inglés Horacio Nelson, ocupa un lugar destacado entre la amplia muestra de armamentos y de otros objetos relacionados con la actividad militar en el archipiélago. Aquí se muestran las dos banderas que dejaron en la isla las fuerzas de Horacio Nelson. Próxima a las insignias inglesas se sitúa la de las Milicias de Canarias.
El conjunto armonioso que regía las cuatro salas, dedicadas a la Gesta del 25 de Julio de 1797, ha sido descontextualizado con el relativo traslado forzoso del cañón El Tigre, que presidía la emblemática sala de la Jornada del 25 de Julio, al Centro de Interpretación del Castillo de San Cristóbal. ¿Hasta cuándo la ausencia de tan preciado trofeo? ¿No se prometió en un principio su retorno en mayo de 2010 a su acogedora mansión? ¿Terminará el legendario Tigre arrinconado y devorado por el tiempo? Uno de los pocos iconos santacruceros ha sufrido ya deterioros en su nuevo emplazamiento. Debemos recordar que el Museo de Almeyda es el lugar más adecuado donde debe exhibirse el simbólico cañón Tigre dado que allí está en su perfecto contexto y hay especialistas que pueden dar explicaciones justas y veraces sobre tan preciado trofeo. El cuartel de Almeyda se puede calificar como uno de los mejores museos militares de Europa. Esperemos que no le privemos del trofeo militar más preciado que posee la isla de Tenerife.
Desde julio de 2009 el cañón El Tigre se encuentra en el Centro de Interpretación del Castillo de San Cristóbal (bajo de la Plaza de España). Por iniciativa del Organismo Autónomo de Museos y Centros (OAMC) del Cabildo Insular de Tenerife y tras un acuerdo con el Ayuntamiento de Santa Cruz de Tenerife, su legítimo propietario, y el Museo Histórico Militar de Canarias (Almeida), actual depositario, el legendario cañón “El Tigre” -que según la tradición popular fue el que mutiló el brazo derecho de Nelson- pasará una larga temporada en el castillo (lo que queda de él) desde donde tan eficazmente defendió Santa Cruz, la noche de la gloriosa gesta del 25 de Julio de 1797.
"Al efecto se ha habilitado una sala expositiva, con museografía bilingüe (español-inglés), en el Centro de Interpretación del castillo de San Cristóbal, abierto al público desde el mes de julio de 2008. Con toda seguridad, la presencia del emblemático cañón, junto a los restos de las murallas del castillo, constituirá un importante incentivo para los numerosos visitantes locales y foráneos. De esta manera, la estrecha colaboración entre las tres instituciones citadas, va a contribuir a que este 25 de Julio de 2009, la muy noble, leal e invicta ciudad de Santa Cruz de Tenerife difunda su patrimonio histórico y celebre orgullosa, con esta importante novedad, la heroicidad y nobleza del pueblo tinerfeño frente al invasor, que tantas veces ha demostrado a lo largo de la Historia."
Con este comunicado justificaba el Presidente del Organismo Autónomo de Museos y Centros, don Francisco García-Talavera Casañas, la estancia temporal del simbólico cañón, que parece va a ser indefinida, ya que de momento el acuerdo se ha prorrogado por otros dos años más no respetando la buena fe y confianza del anterior depositario con el agravio de cierto abuso de autoridad. En la escasa permanencia en este escondrijo el cañón El Tigre ha sufrido ya algunos desperfectos, (Nota 11) de tal manera que el concejal de Ciudadanos de Santa Cruz, Ángel Isidro Guimerá, ha pedido que sea devuelto al Cuartel de Almeyda, donde estará más seguro ante cualquier eventual percance. No obstante, han procurado renovar la imagen del Castillo de San Cristóbal para su reapertura y en concreto el escondite donde "duerme" el cañón Tigre, que cuenta con nuevos elementos e imágenes y un espejo para que dé la sensación de mayor espacio (Nota 12). Sin embargo, aun con todos los arreglos que se han hecho no es el sitio apropiado para exhibir el simbólico cañón El Tigre. El lugar adecuado es el Museo Militar Regional de Almeyda, que le está esperando como agua en mayo, para exhibirse en su entorno de la Gesta del 25 de Julio de 1797.
Símbolo de la Gesta y de Santa Cruz
En el Museo Militar de Almeyda el cañón El Tigre, el gran símbolo y realidad de aquella gesta del pueblo de Tenerife, se mostraba en el centro geométrico de la sala emblemática de la Jornada del 25 de Julio. Junto al cañón, un artillero con uniforme del Real Cuerpo de Artillería empuñando el botafuego presto a disparar el cañón. También en las inmediaciones se muestran varios fusiles británicos con la marca de prueba de la Torre de Londres, así como la marca de la corona con las iniciales reales G. R. (George Rex). Rodeando la sala, varias vitrinas contienen las distintas secuencias del combate. Sin embargo, en el Centro de Interpretación del Castillo de San Cristóbal (bajo de la Plaza de España) su finalidad es simplemente de atracción turística con cierto prurito estadístico, misión que ya cumplía con creces en el Museo Militar Regional de Canarias de Almeyda, y no forma unidad temática con la explicación monográfica dedicada al propio Castillo de San Cristóbal, desde su edificación en 1575 hasta su derribo en 1928.
La Relación Circunstanciada de Monteverde y algún otro documento nos hablan de un cañón situado en una tronera del Castillo de San Cristóbal que tuvo un protagonismo especial en la noche del 25 de Julio de 1997 y al que atribuyen la pérdida del brazo de Nelson (Nota 13). Este cañón, que el pueblo tinerfeño empezaría a considerarlo como “mítico” en la lógica alegría de contar las respectivas hazañas después de una victoria tan sonada, acabó identificándolo con el cañón denominado El Tigre, pues el pueblo por costumbre desea concretizar los hechos épicos con los símbolos.
La tradición popular le atribuye haber sido el arma que mutiló a Nelson, y la musa canaria del pasado siglo le improvisó la siguiente redondilla:
Maté a Bowen atrevido,
a Nelson le quité un brazo,
a veintidós de un balazo
muertos, al inglés, vencido.
Viera y Clavijo relaciona la pérdida del brazo a un cañonazo en el epitafio Hic jacet Nelson, sed non omnis [Aquí yace Nelson, pero no todo] que compuso a la muerte del Almirante Nelson, lo que indica que para esas fechas ya corría la leyenda o tradición popular del cañón Tigre.
Aquí, roto el vital lazo.
NELSON, héroe marinero
yace; mas no todo entero,
pues se echa ménos un brazo.
Perdiólo de un cañonazo
quando batido salió
de Santa Cruz; y si halló
triunfos, los pudo adquirir
en Trafalgar y Abuquir;
pero en TENERIFE no.
El poema está en Colección de algunos Opúsculos Poéticos, manuscrito autógrafo de 61 hojas sin numerar de José Viera y Clavijo que se conserva en la Biblioteca Municipal de Santa Cruz de Tenerife. Se imprimió en una hoja en 4.º, bajo el siguiente título: Epitafio del Almirante Nelson. // El Impresor lo dedica a // Don Enrique Casalon, // para que lo haga imprimir en L. Está reproducido en El arcediano que tenía la sonrisa de Voltaire. Precedido de un apunte biográfico de Dionisio Pérez. Biblioteca Canaria. Santa Cruz de Tenerife, s. a., pp. 61-62. Elías Zerolo poseía un ejemplar de este curioso epitafio y lo dio a conocer en el Diario de Tenerife. Extraordinario 1797-1897. (Nota 14).
Ningún historiador ha podido demostrar que El Tigre hiriera a Nelson pero si la tradición popular lo admite, dejemos que esta bella leyenda haga de nuestro cañón un símbolo, como nos lo recuerda el poeta José Tabares (1850-1921) (Nota 15) en su bello soneto:
¿Y eres tú el que en la lid brava y temida,
al vomitar el plomo de tu entraña,
diste cima al fragor de la campaña
causando a Nelson la sangrante herida?
¿O eres, acaso, máquina mentida,
mudo testigo de la heróica hazaña,
fantasma popular, burda patraña,
de tantas como surgen en la vida?
Verdad o error, montando en tu cureña
como en negro corcel audaz guerrero,
ciñes el lomo de tan alta gloria …
Por la espalda del mundo se despeña
de modo igual lo falso y verdadero:
¡Bien con tu fama vives en la historia!
Entre otros poetas han cantado al cañón El Tigre Juan Arzadun Zabala, teniente de Artillería, Domingo Cabrera Pérez y Juan Carlos Monteverde García.
El Tigre para los tinerfeños supone mucho, tiene su toque romántico; es de disparo por mecha, de bella estructura y cuidado acabado, pero su valía va más allá: es el símbolo de la derrota a una Inglaterra poderosa, y en ocasiones enemiga de España. Los símbolos tienen una gran importancia en la vida de los pueblos; por ellos se vive y muere si es necesario. Símbolo de aquella Gesta gloriosa, El Tigre ha pervivido en la memoria del tinerfeño que aboga para que retorne pronto a su entorno del Museo de Almeyda, donde cumplirá mejor la simbología de la Gesta del 25 de Julio de 1997. Las opiniones aparecidas en la prensa, medios de comunicación y conversaciones de la gente del pueblo muestran cierto asombro, perplejidad y aturdimiento ante la falta de seriedad que demuestran nuestras autoridades en el cumplimiento del acuerdo del retorno del Cañón El Tigre a su anterior emplazamiento del Museo de Almeyda.
Notas
1.- “Tigre”, en su castillo”. Por Francisco García-Talavera Casañas.
Disponible en www.museosdetenerife.org/eve_articulo.php?ID=1588... - En caché [Consultado el 25/VIII/2010]
2.- Cubillo Ferreira, Antonio: El Sr. Monty, el cañón español “Tigre” y su falsedad. En EL DÍA, Sábado, 31 de Julio de 2010 p. 17. Disponible en www.eldia.es/.../1-Sr-Monty-canon-espanol-Tigre-falsedad.htm - En caché [Consultado el 25/VIII/2010]. Vide: MONTEVERDE, Juan Carlos: El Sr. Cubillo Ferreira y el cañón Tinerfeño “Tigre”.En EL DÍA, Viernes, 6 de agosto de 2010 p. 12. Disponible en www.eldia.es/.../12-Sr-Cubillo-Ferreira-canon-tinerfeno-Tigre.htm - En caché [Consultado el 25/VIII/2010].- ONTORIA OQUILLAS, Pedro: El reloj del Sr. Cubillo no marca la hora. En EL DÍA / LA PRENSA, Sábado, 7 de Agosto de 2010 p. 8.
3.- TOUS MELIÁ, Juan: El Tigre. Un cañón de a 16. Historia y leyenda. Santa Cruz de Tenerife 1999 p. 9.- ÍDEM, Guía Histórica del Museo Militar Regional de Canarias. Santa Cruz de Tenerife 2000 pp. 65-66.
4.- Otros cañones de a 16” que defendieron la Plaza de Santa Cruz fueron El Tirano, El Atrevido, El Yncendio, El Rayo, El Estrago, El Júpiter, El Mustafá, El Gallardo, El Intrépido, El Belicoso, El Elefante, El Feroz, El Trueno, El Vesubio, El Relámpago, El León, El Marte, El Saturno, El Invencible, El Bufadero y otros.
5.- TOUS MELIÁ, Juan: El Hércules. El cañón más precioso del mundo. San Cristóbal de La Laguna 2004.
6.- CIORANESCU, Alejandro: Historia de Santa Cruz de Tenerife (I-IV). Santa Cruz de Tenerife 1998. Cfr. T. II p. 330.
7.- TOUS MELIÁ, Juan: El Tigre. Un cañón de a 16. Historia y leyenda. Santa Cruz de Tenerife 1999 p. 11.- MONTEVERDE, Juan Carlos: Manuel Martel Carrión, el redescubridor del “Tigre” en EL DÍA, Viernes, 23 de Julio de 2010 p. 9. Disponible en www.eldia.es/.../1-Manuel-Martel-Carrion-redescubridor-Tigre.htm - En caché [Consultado el 25/VIII/2010]
8.- COLA BENÍTEZ, Luis. Un poema inédito dedicado al cañón “Tigre”. En EL DÍA, Martes 25 de Julio de 1995, pág. XVI (Extra).- DIARIO DE TENERIFE. Extraordinario 25 de Julio 1797-1897 pág. 35.
9.- Archivo General Militar 2ªS., 8ºd. Leg. 459.- TOUS MELIÁ, Juan: El Tigre. Un cañón de a 16 p. 12.
10.- Diario de Tenerife 28 de Julio de 1896.
11.- Periódico LA OPINION, 27 de mayo de 2010: El cañón Tigre, dañado tras las lluvias de febrero. Disponible en www.laopinion.es/.../canon-tigre-danado-lluvias-febrero/287599.html - En caché [Consultado el 25/VIII/2010].
Disponible en www.laopinion.es/cultura/2010/07/29/.../296687.html - En caché [Consultado el 25/VIII/2010].
ESCOBILLON.COM: ¿Qué quieren hacer con nuestro cañón Tigre? Disponible en www.elescobillon.com/.../¿que-quieren-hacer-con-nuestro-canon-tigre/ - En caché. [Consultado el 25/VIII/2010].
El cañón Tigre falta a su fiesta. Disponible en www.loquepasaentenerife.com/.../23.../elcantigrefaltaasufiesta - En caché [Consultado el 25/VIII/2010].
EL DÍA, Jueves 1 de Julio de 2010: El castillo de San Cristóbal reabrirá con motivo de la Gesta tras 5 meses cerrado. http://www.eldia.es/2010-07-01/santacruz/1-castillo-San-Cristobal-reabrira-motivo-Gesta-meses-cerrado.htm.
12.- “El Tigre”, en su castillo. Por Francisco García-Talavera Casañas.
Disponible en www.museosdetenerife.org/eve_articulo.php?ID=1588... - En caché [Consultado el 25/VIII/2010]
13.- Periódido LA OPINION: El cañón Tigre, dañado tras las lluvias de febrero. Disponible en www.laopinion.es/.../canon-tigre-danado-lluvias-febrero/287599.html - En caché [Consultado el 25/VIII/2010]
14.- EL DÍA, Viernes 23 de Julio de 2010. Disponible en www.eldia.es/.../santacruz/0-Castillo-San-Cristobal-renueva-imagen-reapertura-miercoles.htm - En caché [Consultado el 25/VIII/2010].-
LA OPINIÓN, 29 de julio de 2010. Disponible en www.laopinion.es/.../castillo-san-cristobal.../296687.html - En caché [Consultado el 25/VIII/2010].
BienMeSabe. Rev. Nº 323. Domingo 25 de Julio de 2010: El Centro de Interpretación Castillo de San Cristóbal reabre sus puertas: “Respecto a la sala donde se encuentra ubicado el cañón, se ha ampliado visualmente el espacio al doble mediante un sistema de espejos que facilitan, mejor aún, la contemplación de su magnitud y belleza”. Disponible en www.bienmesabe.org/.../el-centro-de-interpretacion-castillo-de-san-cristobal-reabre-sus-puertas - En caché [Consultado el 25/VIII/2010
15.- CARDELL CRISTELLYS, Juan Carlos: Cronología de los prolegómenos en la Gesta del 25 de Julio de 1797-1. Santa Cruz de Tenerife 2004 p. 309.-COLA BENÍTEZ, Luis: Reflexiones sobre el ataque de Nelson a Santa Cruz de Tenerife 1797. A propósito de un documento olvidado. Goya Ediciones, Santa Cruz de Tenerife 1991.- COLA BENÍTEZ, Luis / GARCÍA PULIDO, Daniel: La Historia del 25 de Julio de 1797 a la luz de las Fuentes Documentales. Santa Cruz de Tenerife 1999 pp. 113-116.- ONTORIA OQUILLAS, Pedro /COLA BENÍTEZ, Luis / GARCÍA PULIDO, Daniel: Fuentes Documentales del 25 de julio de 1797. Santa Cruz de Tenerife 1997 pp. 178-193 Relación Circunstanciada de Monteverde.
16.- ÁLVAREZ DE BUERGO, M..: Inventario General de Manuscritos de la Biblioteca Pública Municipal. Santa Cruz de Tenerife1989 p. 94, ms. 178 (1).- DIARIO DE TENERIFE. Extraordinario 25 de Julio 1797-1897 pág. 35.- TOUS MELIÁ, Juan: El Tigre. Un cañón de a 16. Historia y leyenda, op. cit., p. 10.
17.- TOUS MELIÁ, Juan: El Tigre. Un cañón de a 16. Historia y leyenda, op. cit., pp. 17-18.
Bibliografía
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ARENCIBIA DE TORRES, Juan: El Cañón “Tigre”, máximo símbolo de la victoria. En “Recuerdo de un bicentenario [1797-1997]” p. 94.
CARDELL CRISTELLYS, Juan Carlos: Cronología de los prolegómenos en la Gesta del 25 de Julio de 1791-1. Santa Cruz de Tenerife 2004.
CATÁLOGO. Gesta del 25 de Julio de 1797. Santa Cruz de Tenerife 1997.
COLA BENÍTEZ, Luis: Reflexiones sobre el ataque de Nelson a Santa Cruz de Tenerife1797. A propósito de un documento olvidado. Goya Ediciones, Santa cruz de Tenerife 1991.
COLA BENÍTEZ, Luis / GARCÍA PULIDO, Daniel: La Historia del 25 de Julio de 1797 a la luz de las Fuentes Documentales. Santa cruz de Tenerife 1999.
HERNÁNDEZ CABRERA, Zenaido: Guía de Tenerife. El País/Aguilar, Madrid 1993 pp. 54-54.
ONTORIA OQUILLAS, Pedro /COLA BENÍTEZ, Luis / GARCÍA PULIDO, Daniel: Fuentes Documentales del 25 de julio de 1797. Santa Cruz de Tenerife 1997.
TOUS MELIÁ, Juan: Guía Histórica del Museo Militar Regional de Canarias. Santa Cruz de Tenerife 2000 pp.63-70.
TOUS MELIÁ, Juan: El Tigre. Un cañón de a 16. Historia y leyenda. Santa Cruz de Tenerife 1999.